Radiofarmacia

 

Un agente de radiodiagnóstico, también denominado, “radiofármaco” consiste en un elemento radiactivo,responsable de emitir la señal de detección,unido a un compuesto químico, orgánico o inorgánico, “ligando”, con afinidad biológica por un órgano o sistema de órganos.

 

 

 

 

 

Muchos factores deben ser considerados en la elección del radionucleído a utilizar en la marcación, entre ellos los más importantes son:

 

.- Período de semidesintegración.

.- Logística y disponibilidad.

.- Cinética biológica del radionucleído libre o no unido al ligando.

.- Dosis de radiación al paciente.

.- Cinética fisicoquímica de los procesos de unión a ligandos biológicamente activos.

 

El transporte “in vivo”, de los compuestos marcados, se ve condicionado por las características estereoquímicas de los complejos que se forman cuando el radionucleído se une a una molécula. Así se definen los distintos mecanismos de transporte, por ejemplo el de absorción, el de concentración en el órgano blanco, el de excreción, etc.

           

 

 

 

 

 

 

 

 

Cada molécula de “radiofármaco” posee un mecanismo específico de localización, por ejemplo el  bloqueo capilar típico de los macroagregados de albúmina y las microesferas, la fagocitosis característica de las suspen-ciones coloidales, el secuestro celular de  glóbulos rojos desnaturalizados en el bazo, el transporte activo como ocurre con el 131I-, la concentración intracelular como en el cloruro de talio (201Tl), la difusión simple como en el HMPAO y la adsorción en el caso de los agentes fosforados con afinidad ósea.

           

Para facilitar el análisis se  describirán  los principales grupos de moléculas  que son factibles de marcar, con  los distintos radionúclído, al tiempo que se discutirán las características químicas de  cada una de ellas.

 

Considerando  que más del 80% de los estudios diagnósticos, que se llevan a cabo en un servicio de medici-na nuclear, se realizan con 99mTc debido,  principalmente, a su energía y disponibilidad es lógico que las investigacio-

nes estén dirigidas a la obtención de agentes que se puedan marcar con este radionúclído y es así que recordare-mos, históricamente hablando, la evolución acarecida para los principales sistemas de órganos.

 

 

AGENTES PARA LA VISUALIZACIÓN MIOCÁRDICA

El primer grupo a tratar corresponde a los agentes con afinidad por las células miocárdicas y que, conse-cuentemente, permiten evaluar el grado de perfusión del órgano.

 

Las principales características que deben poseer estos agentes son:

                                                               

a.- acumulación intracelular en forma proporcional al flujo sanguíneo regional.

b.- tener una rápida y eficiente depuración sanguínea.

c.- poseer comportamiento  fisiológico.

d.- baja concentración pulmonar y hepática.

e.- estar marcados con un radionucleído que posea  energía apta para la cámara gamma.

 

El uso del cloruro de talio (201Tl) descubierto en 1973 por Leibowitz y colaboradores, que debido a su com-portamiento biológico análogo al del potasio se aproxima a los postulados antes enunciados, existe una realidad  en la medicina nuclear “la continua disponibilidad de este radionúclido en los servicios de medicina nuclear”.

Es así que se alentaron los desarrollos de moléculas, con afinidad cardíaca, marcadas con 99mTc; entre los primeros trabajos están los de  Deutsh, en 1981, en los cuales se comunicó el  desarrollo de complejos catiónicos formados por  ligandos bidentados de moléculas de arsinas, fosfinas y halógenos, por ejemplo la o-fenilbisdimetil-arsina (DIARS) (figura 12) y la 1,2 dimetilfosfina etano (DMPE) que inyectados en modelos biológicos brindaron excelentes resultados que no se repitieron en seres humanos.

Otra línea de investigación la constituyó el desarrollo de los complejos catiónicos hexacoordinados de alquil-isonitrilos que se marcaron con 99mTc en estado de valencia I; entre los primeros que se sintetizaron se encontraba el terbutilisonitrilo (TBI) que al ser administrado en seres humanos presentó una adecuada concentración miocárdica que no se reflejó en la calidad de las imágenes dada la alta captación pulmonar y hepática del agente.

Por este motivo se continuaron desarrollando nuevos agentes llegando finalmente al metoxiisobutilisonitrilo (MIBI) que se adecuaba a las necesidades mínimas de evaluación de la función miocárdica.

La síntesis de complejos neutros, estables y liposolubles de 99mTc fue otra de las alternativas de desarrollo; esto lo llevó a cabo Nunn  utilizando, para ello, oximas y entre estas se destacó la  99mTc  (ci-tris-1,2 ciclohexano-dioxamato) metilborato o 99mTc-SQ 30217 comercializado por Squibb Diagnostic con el nombre fantasía de “cardio-tec” al cual también se lo conoce como “teboroxima” (figura 13)

En 1987 Deutsch informó sobre la síntesis de una nueva línea de agentes para la evaluación miocárdica; su característica principal era la de ser cationes que poseían ligandos mixtos compuestos por una fosfina y una Base de Schiff que se marcaban con 99mTc en estado de valencia III. Posteriormente esta última fue  cambiada por éteres de fosfina lo cual permitió disponer de dos kits de fácil marcación, el Tc-P53 y el PL37 (figura 14) que al igual que la teboroxina poseen una limpieza plasmática muy rápida.                          

Los trabajos de Lahiri (1989) condujeron al desarrollo de nuevos  complejos catiónicos, entre ellos el 1,2 bis 2-etoxietilfosfinoetano o tetrafosmin; mientras que el grupo de trabajo del Fazio, en cooperación con el de Deutsch, también desarrollaron complejos catiónicos monovalentes del 99mTc con ligandos difosfinas éter sustituido; uno de ellos, que se marca con 99mTc en estado de valencia III, es un ligando tetradentado de N2O2 con derivados de acetil-acetona y etilenediamina; el TcQ3 (figura 15), uno de los mas ensayados, no ofreció ventajas ante el MIBI dado que la relación de actividad en el corazón vs. la actividad en el hígado era de 1:3.     

Por último cabe mencionar los trabajos de Pascualini y Duatti que desarrollaron complejos neutros de 99mTc, en estado de valencia V, entre nitridos con ligandos de ditiocarbamato neutro (NOET) que, en los primeros trabajos publicados parece poseer un comportamiento biológico análogo al del potasio .

En el cuadro comparativo siguiente se resumen las  características  principales de algunos de los agentes miocárdicos  antes descriptos.

 

     CARACTERÍSTICAS

Tl-201

MIBI

TEBOROXIMA

TETRAFOSMIN

FURIFOSMIN

NOET

Clase

Elemento

Isonitrilo

Bato

Difosfina

Shiff/fosfina

Nitrido

Carga

Catión

Catión

Neutro

Catión

Catión

Neutro

Lipofilicidad

Baja

Alta

Alta

Alta

Alta

Alta

Redistribución

No

No

No

No

Excreción

Renal

Renal

Renal

Renal

Renal

Renal

Marcación

 

10min.100C

15min.100C

Tem.Ambiente

Tem.Ambiente

20min.100C

rem/dosis

1.05

1.06

1.8

0.85

0.9

?

Límite de definición

2.5-3.0

2.0-2.5

4

1.5-2.0

2.0-2.5

2.0-2.5

 

 

Para el análisis de las áreas infartadas, desde hace años, se utilizan agentes fosforados, por ejemplo el pirofosfato de sodio (99mTc) que se concentra en las células dañadas por interacción con las incrustaciones mito-condriales de calcio; otra posibilidad es el uso del anticuerpo monoclonal antimiosina (111In) que, además, permite diferenciar área necrótica de isquémias severas.

El metabolismo miocardico se  puede evaluar mediante la administración de ácidos grasos marcados con 123I o con 11C, estos poseen el radionúclido unido a los átomos de carbono terminales; de esta forma,  por el mecanismo de b oxidación seran, los últimos en ser metabolizados resultando una permanencia cuantificable del agente de radiodiagnóstico en la célula miocardica.

Otra posibilidad es la utilización de la 2-fluor-2-deoxi-D-glucosa (18F) (FDG) que, luego de su administración, es intracelularmente fosforilada dando la FDG-6-fosfato (18F) que al no poder ser utilizada como substrato metabóli-co del proceso de glucólisis queda retenida en el citoplasma celular sin poder pasar a fructosa-6-fosfato.

 

 

AGENTES PARA LA VISUALIZACIÓN HEPATOBILIAR

 

En la línea de desarrollos de agentes diagnósticos con afinidad hepatobiliar Harvey, Loberg y Cooper, en 1975, comunicaron la síntesis de un nuevo grupo de agentes, los derivados del ácido iminodiacético que, fácilmente, se marcan con 99mTc y permitieron reemplazar a los, hasta ese momento utilizados, marcados con  131I.

Entre estos se diferencian dos grupos, los alquilsustituidos,  y los derivados halogenados; en ambos casos se trató de mejorar la calidad del tránsito hepatobiliar, al margen del tenor de bilirrubina libre, así como su grado de excreción renal.

 

 

AGENTES PARA LA VISUALIZACIÓN RENAL

El sistema renal  puede ser evaluado en forma dinámica, lo cual implica estimar el grado de vascularización del parénquima o bien morfológicamente en cuyo caso se ponen de manifiesto alteraciones y defectos estructurales del órgano.

Para efectuar ambos tipos de estudios los agentes a utilizarse deben ser  hidrosolubles; así son extraídos de compartimiento plasmático,  por filtrado glomerular, o bien son secretados a nivel del túbulo contorneado proximal o se unen a enzimas de membrana en las células tubulares.  

Históricamente hablando, entre los primeros agentes utilizados sé encontraban los medios de contraste ioda-dos, marcados con 131I, pero a partir de los años 70  comenzó la utilización de complejos que, marcados con 203Hg o 197Hg,  sé concentraban específicamente en la corteza renal.

En la línea de agentes para la realización de estudios morfológicos, utilizando como radionúclido al  99mTc, los más importantes son los que emplean como ligando al ácido 2,3 dimercaptosuccínico, al gluconato de calcio o al glucoheptonato de calcio.

El estado funcional se evalúa mediante la realización de radiorenogramas; técnica  la cual correlaciona el flujo sanguíneo renal, el tránsito por las diferentes estructuras, y la velocidad de excreción.

Entre los primeros agentes, utilizados con este fin, se encuentra el o-iodohipurato de sodio marcado, inicial-mente, con 131I y posteriormente con 123I; pero en función de las características dosimétricas del primero y la dispo-nibilidad del segundo los desarrollos de moléculas para marcar con  99mTc significaron un gran avance diagnóstico en el estudio de este órgano.

Así, por ejemplo, los DADS (figura 16) o N,N´-bis-(mercaptoacetil)-etilendiamina, que si bien funcionaron en modelos biológicos no dieron buenos resultados en seres humanos, sirvieron para iniciar una serie de agentes que terminan en los trabajos de Fritzberg y col. que utilizando  triamino monosulfuro  sintetizaron el S-benzoilmercapto-acetil-triglicilglicilglicina o MAG-3.

Por último se debe mencionar a la L,L-etilendicisteina o L,L-EC, precursor en la síntesis del ECD, que marcada con 99mTc brinda información referente a la dinámica renal con un comportamiento similar al del hipuran.

 

 

AGENTES PARA LA VISUALIZACIÓN CEREBRAL

 

Para que un agente diagnóstico radiactivo pueda atravesar la barrera hematoencefálica, cuando esta se en-cuentra intacta, debe ser neutro, lipofílico y de bajo peso molecular pero, para que la imagen sea cuantificable, ade-más, debe permanecer en el compartimiento.

El 127Xe y el 133Xe, el 11C-butanol y la 123I-antipirina cruzan la barrera hematoencefálica en ambas direcciones por lo cual se dificulta la adquisición de imágenes; entonces es lógico el desarrollo de moléculas que queden reteni-das en el cerebro.

 La síntesis de la N-isopropil-p-iodo anfetamina (123I) permitió disponer de un agente con las características deseadas pero se tropezaba con la disponibilidad del radionúclido lo cual llevo a que  en los últimos años se desarro-llaran complejos neutros y liposolubles marcados con 99mTc.

 Entre los primeros intentos se encuentran los derivados del bis-aminoetano tiol (BAT), que se unen al radio-núclido en estado de valencia V, pero que no fueron eficientemente captados por las estructuras cerebrales.

Años mas tarde Troutner y col. sintetizan la propilenamina oxima o PnAO que, químicamente hablando, cum-plía con los postulados del agente ideal pero debido a su poca eficiencia diagnóstica se desarrollaron nuevos deriva-dos, entre ellos el CB-PAO (figura 17) que al ser marcado con 99mTc atravesaba la barrera hematoencefálica pero permanecía por corto tiempo en el compartimiento cerebral. Luego de intentar con distintos sustituyentes se logró sintetizar el dl-HM-PAO o hexametil propilen aminaoxima que no solo se marcaba con 99mTc sino, además, pasaba la barrera hematoencefálica quedando retenido en el cerebro merced a su reacción con el glutation intracelular de las neuronas.

En los últimos años se reportó la síntesis de una serie de derivados N2S2 entre los que se destaca el dímero de etilcisteinato o ECD del cual se demostró que, solamente, la forma L,L queda retenida en el cerebro; esta, una vez marcada con 99mTc, cruza la barrera hematoencefálica merced a que forma un complejo altamente lipofílico que posee dos grupos éster eléctricamente neutros. Ya en el compartimiento cerebral se hidrolizan originando la forma ácida que al ser hidrosoluble no puede atravesar la barrera hematoencefálica.

 

 

AGENTES PARA LA EVALUACIÓN DE PROCESOS ONCOLÓGICOS

En oncología, además del uso de anticuerpos monoclonales, marcados con distintos radionúclidos o de los hidratos de carbono marcados con 99mTc los pequeños péptidos representan la tecnología diagnóstica con mayor futuro dada su alta especificidad y fácil marcación.

Estos son moléculas, constituidas por cadenas de aminoácidos  con un largo y secuencia determinada, son susceptibles a la degradación por la acción de las exo y endopeptidasas lo cual condiciona su comportamiento far-macocinético.

Para efectuar marcaciones, con 99mTc, se necesita incorporar un ligando específico que, en función de su disposición molecular, no altera la especificidad del peptido;  lo usual es utilizar el radionúclido en estado de valencia V dado que así puede formar complejos tetradentados con quelantes o con ligandos que, en su molécula, posean átomos de azufre o nitrógeno (figura 18), un ejemplo de esto es el peptido P587 de receptores de somatostatina (figura 19).

 

                                              

AGENTES PARA LA VISUALIZACIÓN Y EVALUACIÓN FUNCIONAL DEL GANGLIO CENTINELA Y VIAS LINFATICAS

 

            Los coloides radiomarcados son los agentes mas utilizados para la localización y evaluación funcional del gánglio centinela y las vías linfáticas. La captación y posterior retención dependen, principalmente, de los procesos de fagocitosis de las partículas coloidales así como de su homogénea dispersión en la linfa que garantiza la llegada hacia y dentro de los gánglios.

            Por todo esto es fácil comprender que la velocidad de migración es inversamente proporcional al tamaño de las partículas coloidales.

           

El agente ideal debería:

1.- Ser un coloide con un tamaño de partículas adecuado pero que presenten muy poca dispersión de tamaño respecto del valor medio.

2.- Que se pueda marcar con solución de pertecneciato de sodio (99mTc)

3.- Que posea una pureza radioquímica constante durante más de 4 hs.

4.- Que se pueda transportar fácil y eficientemente a través de los vasos linfáticos.

5.- Que posea una rápido transporte

6.- Que quede retenido en el gánglio centinela el tiempo necesario para que este pueda ser evaluado.

7.- Que posea alta estabilidad “in vivo”

           

Dentro de los agentes mas utilizados están el coloide de sulfuro de tecnecio (99mTc), los nanocoloides de al-búmina marcados con (99mTc), el coloide preformado de sulfuro de antimonio (99mTc), el coloide preformado de sul-furo de renio (99mTc) y el dextrano 60.000 marcado con  (99mTc) que, si bien no es un coloide, debido a su elevado peso molécular posee un comportamiento biofísico similar dado que se moviliza, a través de los vasos linfáticos, co-mo esferas de 2 nm de diámetro.

 

 

Bibliografía

 

1.- Radiofarmacia

Sociedad Argentina de Radiofarmacia

Foro Permanente de Farmacia y Bioquímica

2.- Alfons Michel Verbruggen

Radiopharmaceuticals: state of the art

Eur.J.Nucl.Med.(1990) 17:346-364

3.- Jean Calude Reubi

Regulatory peptide receptors in nuclear medicine

Society of Nuclear Medicine, (1998); 44-47

4.- Irene Virgolini

Scintigraphy with radiolabeled peptides

Society of Nuclear Medicine, (1998); 48-51